domingo, 30 de septiembre de 2012

Descárgate.

*
P
a
d
re 
nuestro 
que estás
 en los cie_
los, santi_
ficado sea
 tu nom_
bre, venga
a nosotros
 tu reino,
hágase tu
 voluntad
así en la
tierra como
en el cielo.
El pan nues_
tro de
cada día
dánoslo hoy
 y perdónanos nuestras ofensas así
como nosotros también perdonamos
 a quienes nos ofenden. Y no nos 
dejes caer 
en la tenta_
ción,
más
líbranos
 del mal.
Amén.
*
¡Que Dios perdone a los grandes pecadores

y perdone también a los que ofenden al prójimo!

¿Quizás él lo pueda hacer, porque tal vez no los sufra!


Así sea.

No vale la pena sufrir por un amor traicionero,,,


...¿Pero cómo se hace?


sábado, 29 de septiembre de 2012

No busco nada que quiera encontrar.


En determinados momentos y según el estado de ánimo que me domine, no tengo interés en buscar -en internet- nada que quisiera, o no, encontrar. Simplemente se me van los deseos de continuar realizando búsquedas, de no saber que buscar y de no tener ánimo suficiente para que se me ocurra algo que despierte mi ansias de continuar, y todo para llegar a un sitio que me devuelva las ganas de cobrar nuevamente el ánimo y proseguir  navegando en la web.
A veces creo que es por mi estado de desgano o de aburrimiento, o quizás cansancio; pero otras pienso que no encuentro temas suficientemente interesantes para que despierten mi atención.

Sin la torta...


por ambicionar la carne.




viernes, 28 de septiembre de 2012

Que mierd. (con perdón) hay que escribir en cualquier motor de búsqueda en la web (en mi caso el maravilloso "Google"), para que no aparezca como el título de alguna canción.


No digo que siempre ocurra ésto, pero si en muchísimas oportunidades.
Será que se nos acabaron las palabras, se terminaron las combinaciones de las mismas para formar una frase diferente.
Que limitados que somos, que escueto es nuestro lenguaje familiar, ese que se suele utilizar para que nuestra edición sea bien posicionada en los distintos buscadores de sitios en la Web.
¡¡¡Que le vamos a hacer, continuaremos en la lucha!!!

Todos somos hipócritas, pero en distinta escala.


Ocurre que a la gente en general le suele ser muy difícil, en algunos momentos de su vida, no ser hipócritas; sin embargo a diferentes grados.
Hay personas que hacen abuso de este grave defecto y se suelen pasar de listas con las gentes a las cuales engañan.
Éstos son casos perdidos y si todo les va bien no habrá problemas, aunque deberían tener en cuenta que en algún momento se les puede caer la careta y las consecuencias no ser para nada agradables.

Jorge Richino.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Google cumple 14 años de vida - Poema




¡¡¡Feliz Cumpleaños Google!!!


Con tan sólo catorce años
   te convertiste en “Gigante”
   …con voluntad, con empeño,
   siempre mirando adelante.

   Quienes seguimos tus pasos
   queremos agradecer
   todo lo que nos brindaste
   para recorrer la Web.

   Tantos temas importantes
   hemos contigo aprendido
   y con tus otros productos
   mucho nos entretuvimos.

   Por tanto ¡Felicidades!
   en tu nuevo cumpleaños,
   y así con inmensa dicha
   …sigan pasando los años.


Autor: Jorge Horacio Richino.

Todos los derechos reservados.

<><><><><>


jueves, 13 de septiembre de 2012

Por si o por no?



Frente a la posibilidad de "hacer o no" algo que está en nuestro pensamiento y sobre ello nos asalta la duda, mi consejo es que tomes la decisión por el "si". 
Siempre y casi por regla general, cuando hemos decidido cambiar pensamientos o actitudes sobre nuestro accionar en la vida, nos cuesta enormemente decidirnos frente al temor de lo que podrá pasar. 
Sin embargo si reflexionamos en que estamos pensando mucho en realizar ese cambio (de allí es que titubeamos tanto), estimo que lo mejor es decidirse y cumplir con lo que nos estamos proponiendo.
Es mayormente seguro que en un 95% no nos equivocaremos, solamente pueda darse un escaso 5% de posibles contratiempos; y frente a esto último no perderemos tanto que en cualquier oportunidad no podamos volver a resarcirnos de ello o repararlo.
Desde ya me refiero a acciones que puedan ser meditadas y no a cosas fortuitas donde interviene el azar.

Jorge Horacio Richino Verdaguer